Además, el proceso de coagulación utiliza fluidos de mayor viscosidad para tratar el agua. Por lo general, hay dos tipos de fluidos viscosos que se encuentran en estos procesos: newtoniano y tixotrópico.
Los fluidos newtonianos tienen una viscosidad que no cambia en función de la tensión mecánica que se les aplica, mientras que los fluidos tixotrópicos tienen una viscosidad que cambia bajo la aplicación de tensión mecánica o cizallamiento. La viscosidad tixotrópica también se conoce como adelgazamiento por cizallamiento, y la viscosidad se reduce con el tiempo a medida que el fluido cizalla. Por esta razón, es importante seleccionar un producto de bombeo que sea compatible con viscosidades más altas.
Si bien el proceso de coagulación es crucial, también puede ser costoso. El costo se determina principalmente por la cantidad de productos químicos que se utilizan en el proceso. Si bien el polímero puede ser más caro por peso, puede ser más eficaz que una sal inorgánica. La eficacia del polímero se puede aumentar si se prepara el volumen de polímero adecuado para asegurarse de que reaccione por completo con el agua del proceso, lo que a su vez reduce el uso de polímero y puede tener una ventaja de costo sobre la sal inorgánica.
Los productos químicos inorgánicos requieren que el operador de la planta de tratamiento logre un equilibrio que requiere una dosificación precisa de los productos químicos. Es probable que demasiado producto químico requiera corrección del pH; mientras que, una cantidad insuficiente, puede resultar en un tiempo de procesamiento adicional para alcanzar la condición deseada.
Los procesos de coagulación requieren mucho tiempo y, por esa razón, pueden resultar costosos. Es importante que las plantas de tratamiento de agua optimicen su proceso con tecnologías rentables.
Los dispositivos de medición, como los detectores de corriente de flujo, miden la densidad de carga neta de las partículas en una muestra de agua. Estos dispositivos ayudan a mejorar y agilizar los procesos de coagulación porque miden cómo está funcionando el proceso en tiempo real.
Además, la mezcla instantánea puede ser una limitación importante para los agitadores en los procesos de coagulación. La mezcla instantánea en el proceso de coagulación requiere un flujo vigoroso en un período de tiempo muy corto, por lo general, menos de un minuto. Por esta razón, es importante seleccionar un motor y un impulsor adecuados para lograr los resultados deseados.
Mientras que la coagulación es principalmente un proceso químico; la floculación es el agrupamiento de partículas a través de un proceso físico. Una vez que ha tenido lugar el proceso de coagulación, el proceso de floculación comienza con la agitación o mezcla del fluido. Esto permite que algunos de los sólidos suspendidos comiencen a unirse y a formar grupos más grandes. Este proceso es asistido por la adición de floculantes y mezcladores.
Una vez neutralizada la carga de las partículas coloidales, mezclar el fluido del proceso permite que se junten más partículas. El objetivo de este proceso es que las partículas agrupadas alcancen un estado en el que se puedan filtrar con más facilidad.
La mezcla del agua del proceso con la adición de floculantes permite que las partículas coloidales se peguen y formen grupos cada vez más grandes. El desafío de este proceso es que se debe agitar el líquido sin separar las partículas. Por esta razón, es importante considerar el cizallamiento de mezcla en el fluido.